JESÚS
TENTADO EN EL DESIERTO
AYUDA PARA PADRES:
1. ¿DÓNDE SE ENCUENTRA LA HISTORIA?
Mateo 4: 1 - 11
2. ¿QUÉ PRINCIPIOS ENSEÑA AL NIÑO(A) ?:
- Jesús es Dios, pero se hizo hombre y experimentó las mismas tentaciones que un ser humano.
- Jesús jamás pecó.
- Jesús venció la tentación con la Palabra de Dios, pues la conocía bien.
3. APLICANDO LA PALABRA:
- La Palabra de Dios es el arma poderosa para vencer la tentación. Nosotros también podemos conocer la Palabra de Dios y decir "NO" a las tentaciones.
- Jesús experimento todas las necesidades y problemas que un ser humano tiene. Él nos entiende y nos provee siempre una salida ante la tentación y el pecado.
- Demos gracias siempre a Dios, porque el nos ha dado su Palabra que es un arma poderosa para vencer la tentación y su Espíritu Santo para guiarnos en las decisiones.
Números en pegatinas
Para complementar el aprendizaje de esta historia bíblica, hicimos una tabla con los números desde el 0 al 40, para que ellos vieran la cantidad de días que estuvo Jesús sin comer en el desierto (40 días y 40 noches) y ejercitar con ello los la numeración y su orden.
Usamos como base un trozo de cartón y unos adhesivos blancos circulares para que los niños vayan poniendo los números en orden. ¡A ellos les encanta hacer actividades usando pegatinas! ¿y a quién no?, así que aprovechamos de usarlas en esta actividad trabajando todos en equipo.
imprimibles
Lámina de aprendizaje imprimible
¡Ya puedes descargar esta actividad con láminas recortables para ordenar la secuencia de la historia!
Para que pudiera durar y ser una actividad reutlizable, plastificamos todas las pieza y usamos un velcro adhesivo para que los niños puedan poner y sacar las piezas.
Imprime gratis esta actividad en el link bajo las imágenes.
Es importante mostrar a los niños la forma en como Jesús respondió ante cada tentación con la Palabra de Dios, y que así como él, nosotros también poseemos esa arma poderosa para vencer cualquier tentación o dificultad. ¡Que agradecidos estamos de que nuestro Señor conoce todas nuestras aflicciones, porque el padeció todas, pero sin pecar jamás!